Los albos consiguieron un empate sin goles ante Águila en el estadio Juan Francisco Barraza, en el que los elefantes cerraron como amplios dominadores y con un rival metido en su terreno.
El 0-0 permitió a los elefantes llegar a 41 puntos, diez más que su más cercano perseguidor, Fas, que tiene 31, y con solo nueve puntos por disputarse, por lo que se vuelve inalcanzable al tope de la clasificación.
El primer cuarto de hora el equipo blanco no logró asentarse bien en el terreno de juego, sobre todo porque la premura por ir al ataque hizo que los jugadores tuvieran algunos pases errados que no permitieron que los elefantes conservaran el balón.
Águila, por su parte, no logró sacar provecho de estos momentos incómodos para los albos, que paulatinamente mejoraron en el terreno de juego y comenzaron a llegar de forma peligrosa a la meta defendida por Benji Villalobos.
Tanto Óscar Cerén como Juan Carlos Portillo comenzaron a aparecer de forma más constante sobre las bandas, lo que permitió que los elefantes no solo se sacudieran la presión sino que además se volvieron más peligrosos en la ofensiva.
Jefferson Polío recibió tarjeta amarilla y luego una roja directa por una falta sobre Portillo, quien no se recuperó y tuvo que ser sustituido por Alexander Larín.
La expulsión de Polío generó protestas de la afición local que lanzó objetos al terreno de juego, lo que obligó al árbitro a parar momentáneamente el juego, y
A los 75 minutos, una incursión por la derecha de Ezequiel Rivas le permitió ingresar al área con balón dominado y mandar un potente disparo que se fue muy cerca de la meta migueleña.
Los elefantes culminaron el juego con toques laterales para abrir la cancha, y generar espacios en la zona defensiva del rival, que cerró filas al verse superado por los albos, que hasta el último minuto buscaron abrir el marcador.